PALABRAS A LOLA

  (Transcripción de la presentación que Luz María Anguita (*) hizo del libro “Antakar, un cuento espiritual” de Lola García Cuesta, el día 1 de diciembre, de 2006. Centro Riojano. Madrid)

  “Dicen que las diosas están renaciendo, que viene la era de las diosas femeninas, el retorno de la gran diosa.  Y yo me pregunto frente a este sorprendente acontecimiento: ¿qué diosa?, ¿cuál es ese retorno?, ¿cómo se manifiesta ese retorno?

  El libro de Lola es una respuesta a esa pregunta.  Lola es una manifestación del retorno de la diosa femenina, la diosa que nos regala sabiduría, nos enseña sus dones y nos desvela los secretos del poder.  Su sabiduría, aquella que nos fue robada y secuestrada hace miles de años.   La mujer sabia es la que vuelve, y nos hace plantearnos en qué realidad vivimos, o cómo es esta incongruente realidad hecha a la medida de los intereses del sistema del poder masculino.

  Como dice Lola en su magnífica novela “Antakar” que hoy nace para el público, vivimos atrapados y cautivos en esta realidad, en la tercera dimensión, en la gran trampa, en el mundo de la gran mentira.  Saramago lo dijo hace unos días en un programa de televisión.: “Vivimos en la era de la mentira, en la cultura de la mentira”, y día a día el ser humano genera más mentiras, engaños y dolor.   Y aquí estamos atrapados pasiva e indolentemente.  Vivimos en un mundo finito, limitado, empobrecido, doloroso, destructivo, castrante y enfermo en el que hemos perdido totalmente nuestra conexión con el “ser”,  hemos aniquilado nuestra capacidad mágica, nuestra conexión  con la mente multidimensional, con la capacidad de crear nuevos mundos, nuevas realidades,  nuevas posibilidades,  es decir hemos perdido nuestra conexión con el  verdadero poder.  Ese poder que no está en las cosas materiales, que no está en el sistema ni en manos de las multinacionales, ni en las complejas y mafiosas redes financieras que gobiernan el planeta, como tampoco está en manos del hombre que genera conocimientos y avanzada tecnología para destruir a sus semejantes y al planeta.

  Lola nos entrega el <arco iris de 9 colores>.   Nos entrega con enorme sabiduría, un mapa nuevo, un mapa cromático y musical de mundos que desconocemos su existencia.   Nos habla de la aventura del amor, de una aventura iniciática, de una aventura cósmica.

  Su novela “Antakar”, es un relato mágico y no por ello irreal, es un relato de sabiduría profunda, de conocimientos sublimes que tocan directamente el alma, el espíritu, la mente.  Nos abre mundos, nos abre portales prodigiosos, nos abre umbrales vibratorios insospechados, dimensiones sorprendentes, mundos maravillosos, pero, fundamentalmente nos abre la conciencia.

  Quiero decirte Lola: ¿cómo agradecerte por este regalo de las diosas? Me emociona saber que seres tan bellos, tan grandiosos y tan sabios como tú circulan por este mundo nuestro con tanta humildad, con tanta prudencia, con tanto respeto,  sin alardear de nada, siempre escuchando atentamente, siempre respetando los ritmos, siempre atenta y sonriente, como lo hace la gente sabia.   “Antakar” el héroe de esta cosmonovela, es tu espíritu y tu conciencia altamente cualificados; es tu propia ruta, es tu misión la que compartes y regalas a los seres humanos. Y yo te agradezco el mensaje que deja tu novela.  Un mensaje de esperanzas, de renovación y de infinito. Nos abre a la posibilidad de que todo puede cambiar o que todo debe cambiar, o que ya es hora que nos pongamos responsables con nuestra propia evolución. Yo seguiré, como espero lo hagan todos los que lean esta maravillosa novela, seguiremos la ruta del arco iris y recorreremos la escala cromática, sintiendo en los más profundo de nuestro corazón la melodía del universo, para poder acceder al mundo cuántico de las verdaderas y reales posibilidades que pertenecen al patrimonio del espíritu y de la nueva conciencia de muchos ciudadanos de este planeta.

  Tu silencio sonriente y amable es el envoltorio de una diosa sabia, que abarca una cosmovisión tan rica, nutricia, tan poderosa sobre la realidad trascendente, que da que pensar. Puedo pensar, que lo he hecho, y decir con propiedad: ¡querida Lola eres una mensajera del pasado, para transformar el presente y modificar el futuro!  ¡Gracias por enseñarnos esta lección magistral!   “Antakar”, tu novela y tú sois una trilogía de amor, un discurso literario que llega a la memoria celular removiendo nuestros más recónditos anhelos y deseos de eternidad.”

  © LUZ MARÍA ANGUITA.

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  (*)Luz María Anguita es Pintora, escritora, lectora y profesora de Tarot. Tiene abierta su consulta desde hace más de 30 años, ejerciendo de profesora desde hace 25. Se la considera como una de las grandes profesionales de Madrid. Lleva 10 años investigando el perdón como terapia personalizada.

  En 1999 publicó El perdón sana tu vida, ed. Autores.

  Desde 1986 ha realizado 6 exposiciones de pintura en distintas galerías de Madrid. Diseñadora de originales artículos ornamentales creados con flores, papeles y cartones reciclados, que transforma en diseños únicos e irrepetibles.

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  ANTAKAR

  (Transcripción de la presentación que Paloma Cirujano (**) hizo del libro “Antakar, un cuento espiritual” de Lola García Cuesta, el día 1 de diciembre, de 2006. Centro Riojano. Madrid)

  “Estoy encantada de estar hoy aquí, presentando a Lola García Cuesta. Una autora que resuena en los mismos acordes que Antakar. Un cuento espiritual que está poblado de frecuencias musicales y de la cadencia de gamas cromáticas de luz, palabras y silencios.

  Quiero darte las gracias de corazón por haberme permitido participar en este sueño tuyo que hoy se hace realidad.

  Ella me contó que lloró el día que tuvo el primer ejemplar de Antakar entre las manos.

  Yo también sentí muchísima alegría cuando, hace poco tiempo, me llamó para decirme que, al fin, su libro estaba en la imprenta.

  Porque se había cumplido, a la vez, su sueño, mi sueño y el de muchos otros que desde puntos lejanos sabíamos que este libro puede llegar a tener una importancia trascendental.

  La había conocido gracias a Patricia Becker. Una gran amiga que ha sido como esos puentes generosos que comparten a los que quieren cuando saben, en lo más profundo, que nos guían en la vida percepciones y objetivos igual de bellos.

  Fue hace un año, en su cocina, en una mesa bajo un lucernario que siempre evoca para mí grandes momentos. Y bajo esos cristales de Patricia Becker, vi., por segunda vez a la mágica Luz María y cené por primera vez con Lola, aunque tuve la impresión de conocerla desde siempre y de compartir con ella la locura lúcida.

  Las dos hemos abandonado nuestra trayectoria profesional en un momento de éxito social, para lanzarnos, igual que lo hace Antakar cuando recorre sus nueve existencias, a la aventura de explorar nuevos territorios y nuevas formas de gestionar la cultura y la vida para el siglo XXI.

  Esa noche, cuando me habló de su manuscrito, sin conocer yo todavía el contenido de Antakar, desbordé todo el entusiasmo del que soy capaz para animarla a que lo publicara ella misma. Sólo con ver el brillo de sus ojos, y observando cómo arropaba en el misterio el contenido de su libro para protegerlo, sentí que tenía que empujarla a desvelar toda esa fuerza que trasmitía en la suavidad con la que, entre sonrisas, hablaba de Antakar.

  Tienes que publicarla, le dije muy efusiva. Y si nadie te escucha, puedes hacerlo tú sola.

  Los escritores ponemos a veces demasiadas expectativas en lo que otros nos pueden resolver y casi ninguna en lo que nosotros somos capaces de crear hasta el final.

  (Yo, por cierto… me dedico a coleccionar cartas de rechazo de editoriales, como un sano ejercicio de reírme de mí misma… y con ellos (que no, de ellos)… después de haber vendido, boca a boca, casi 700 ejemplares de mi novela sólo durante el primer mes. Porque, evidentemente, yo también soy una autoeditada, como me gusta llamarme con humor.

  Esa noche, intuí en la fuerza de su mirada que ese libro saldría a la luz y de la luz gestado por su mano desde el principio hasta el fin. Desde el escrito original, el dibujo de portada, la colaboración con Carmen Bendito en el diseño, hasta su supervisión en los trabajos en la imprenta.

  He comenzado hablando de la forma de autogestionar su novela, porque se enseña con el ejemplo, y porque esta obra no es sólo importante por su contenido.

  Lola García Cuesta ha demostrado que los sueños, como las utopías, se hacen reales cuando se unen el corazón, la voluntad y la firme convicción de que todos tenemos un hueco en el mundo desde el que podemos transformarlo, atreviéndonos a contribuir a generar nuevos patrones, con enfoques y soluciones atrevidas. La vida es sencilla: amor y trabajo.

  Siguiendo la estructura de cuento de Antakar, voy a narraros un pequeño relato:

  Un hombre se encontró un huevo de águila. Se lo llevó y lo colocó en el nido de una gallina de corral. El aguilucho fue incubado y creció con la nidada de pollos. Durante toda su vida, el águila hizo lo mismo que los pollos, pensando que era uno de ellos. Escarbaba la tierra, en busca de gusanos e insectos, piaba y cacareaba. Incluso, sacudía las alas y volaba unos metros por el aire, como hacían los demás pollos. Después de todo, ¿no es así como vuelan los pollos?

  Pasaron los años, y el águila se hizo vieja. Un día divisó en lo alto, en el limpio cielo azul,  una magnífica ave que flotaba elegante y majestuosamente entre las corrientes de aire, moviendo apenas sus poderosas alas doradas. Comenzó a mirar asombrada hacia arriba. «¿Qué es eso que vuela?», preguntó a una gallina que estaba junto a ella. «Es el águila, el rey de las aves», respondió la gallina. «Pero no pienses en ello. Tú y yo somos diferentes de él». De manera que el águila no volvió a pensar en ello. Y murió creyendo que era una gallina de corral.

  Estructuras cercadas, y para algunos tan inamovibles como las vallas del corral de una granja, son las que sustentan a una sociedad que, afortunadamente, comienza ahora un proceso de profundo cambio, pues vive hoy, más que nunca, una dualidad entre los que creen que no es posible cambiar nada, a pesar de estar descontentos con su vida y con las estructuras de pensamiento que lo sustentan, y los que creemos, como Lola García Cuesta, yo y, afortunadamente otros muchos, que, precisamente por ser tan delicado el momento, tenemos el privilegio de inventar, porque todo está por hacer de nuevo.

  Y que la posibilidad de crear nuevas realidades exige el cambio de nuestro propio pensamiento y de nuestra forma de movernos por el maravilloso baile de la vida.

  Es de ese nuevo espíritu aventurero y de ese nuevo paradigma del que participa Lola García Cuesta. A la que desde el principio, percibí como un ser libre y creativo que, por encima de sus intereses personales, estaba dispuesta a vencer en su travesía.

  Como una trapecista que cruza ella sola el alambre con su manuscrito en las manos, escapando del miedo al abismo, iba a defender cada una de las bellas palabras y cada uno de los delicados trazos del dibujo que nos abre la puerta de Antakar.

  Editarse ella sola no ha sido un ejercicio de soledad de desierto, sino el paso previo y necesario, para poder acercarse a nosotros, fuera como fuera, aún a costa de un gran esfuerzo personal, para compartirnos los sentimientos, las emociones, las aventuras y los retos de Antakar.

  Como él, Lola sabía lo que quería y desconocía lo que ocurriría. Pero se sentía dispuesta a iniciar su gran aventura.

  Antakar es un libro que nos habla del juego de la vida, de la magia del instante, de la capacidad creadora del ser humano, de la libertad y del deseo de contribuir a ampliar el enfoque de las conciencias.

  La forma de asumir la responsabilidad individual que ha tenido ella misma, y su amor a esta obra, está plasmada en cada una de sus páginas, donde consigue transmitirnos valores esenciales que no tienen ni tiempo ni espacio.

  Hay libros que se ofrecen para ser subrayados y llenarse de asteriscos y admiraciones. Así es Antakar.

  Que contienen esa sabiduría de los cuentos que hace que los niños nos pidan que se los leamos una y otra vez.

  Antakar es un libro para leer, releer y girar con él en el significado esférico y profundo que resuena en la esencia de cada una de sus palabras.

  Antakar es una obra abierta a todos, porque nos habla del ser humano en su travesía. Habla de todos nosotros.

  De nuestros aciertos y aprendizajes. Del Amor con mayúsculas y del amor a las pequeñas cosas.

  Un libro que ayudará a muchos a volver a creer que todo es posible y que, como el héroe Antakar, todos podemos ir superando, una a una, todas nuestras pruebas.

  Con este libro, Lola García Cuesta no se queda quieta contemplando la orilla, sino que ha decidido bañarse en la inmensidad del mar azul, volando por su cielo, como esa águila dorada que va a la búsqueda de un nuevo hogar donde el horizonte es infinito.

  Gracias, Lola, porque con tu libro nos ayudas a muchos a sentirnos más acompañados en el rumbo de nuestros viajes y porque nos has abierto la puerta del corazón de Antakar para que nuestra vida se llene de colores. Gracias por ser tan valiente y por creer que todo es posible. Que todo el éxito del mundo sea para ti.”

   © PALOMA CIRUJANO

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  (**) Paloma Cirujano, madrileña, ex-miembro del Comité Internacional de Ciencias Históricas. Ha publicado numerosos artículos y expuesto ponencias en España y en el extranjero. Durante más de una década trabajó en revistas internacionales de arte contemporáneo. Redactora jefe de la revista de arte contemporáneo Lápiz. Autora de diversos libros de Historia, Arte y literatura. Coautora de "Historiografía y nacionalismo español. 1834-1868";"Great historians". "An international Dictionary" patrocinado por la universidad de Harvard. Directora de proyecto y autora del libro "Vallecas, Historia de un lugar" editado por el Consejo superior de Investigaciones Científicas y el Ayuntamiento de Madrid."Juncos de agua" -edición de autor- ."Los jueves de los ojos" -edición de autor-. Experta en terapias energéticas ortomoleculares.

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  Presentación de ANTAKAR

  (Transcripción de la presentación que Diego Armario (***) hizo del libro “Antakar, un cuento espiritual” de Lola García Cuesta, el día 1 de diciembre, de 2006. Centro Riojano. Madrid)

  “Llevo, según me recordaba Lola el otro día, unos veinte años como profesor en la Universidad, y aunque no me dedico a la docencia como actividad principal, a lo largo de este tiempo han pasado muchos alumnos por mis clases.

  A veces me ocurre que me encuentro con alguno que me saluda y yo ni siquiera recuerdo su nombre.

  El caso de Lola es distinto.

  Hacia muchos años que no sabía nada de ella y hace unas semanas encontré una nota suya y supe perfectamente quien era.

  En la vida hay gente que pasa inadvertida y hay gente que nunca resulta indiferente, y ese es el caso de Lola García Cuesta.

  Una mujer a la que conocéis todos, pero a la que a mi me gustaría hacerle un retrato, porque tal vez mi visión desacostumbrada a ella, tenga algún matiz diferente.

  Y para hacerle ese retrato voy a utilizar como recurso ANTAKAR

  Su primer libro.

  Un libro que ella lo subtitula como un cuento espiritual, y que en el fondo podría ser el libro de su propia vida.

  Todos los escritores volcamos sobre las páginas de nuestros libros, jirones de nuestra existencia y también de nuestras ausencias, trozos de ilusiones, de sueños irrealizados o deudas de amor u odio. En cada libro que escribimos hay algo de nosotros mismos, sobre todo si son libros que nacen de una inaplazable necesidad de escribir.

  Por eso pretendo el hacerle un retrato hablando de su libro, porque su protagonista Antakar, es un ser que ha sido elegido para una misión especial y para poder cumplirla vive nueve existencias.

  Yo creo que Lola ha vivido esas nueve existencias hasta que ha encontrado la existencia en la que se encuentra cómoda. En la de escritora.

  Cualquiera que eche un vistazo al currículo de una mujer joven como Lola saca la conclusión de que efectivamente, como Antakar, ha vivido mucho y en muchos mundos.

  Es como si Lola, al igual que su protagonista, hubiera buscado de un lugar a otro, y de una experiencia a otra, cumplir una misión y para ello se ha preparado cultivando especialmente su sensibilidad, su vena artística, en definitiva, su inquietud por ver mas allá de lo que son capaces de percibir nuestros ojos miopes, de humanos que disfrutan con la pequeñez de nuestro entorno.

  Lola además de haber hecho incursiones en las artes plásticas – música, danza y dibujo o cerámica – que es una forma de atreverse a imitar a los dioses, también ha pisado el barro y ha trabajado en publicidad y en periodismo.

  Yo diría que es una contradicción volar tan alto y hacer a continuación un vuelo rasante con tanto peligro, pero tal vez haya que reconocer que casi siempre para elevarse y disfrutar de lo más exquisito y saber valorarlo, es preciso haber comprobado cómo son y cómo viven los otros mortales que nunca elevan el vuelo.

  Lola García Cuesta para entender lo que quería ser y para lograr interpretar sus propios viajes ha estudiado Metafísica, Cábala Oculta, Astrología, Numerología, Geometría sagrada, Geobiológica y algunas otras ciencias que ni siquiera me atrevo a pronunciar.

  Lola García Cuesta ha sido también actriz de doblaje, es decir, le ha puesto su voz a otros personajes, los ha sustituido de forma creíble, ha tomado posesión de otras mentes y ha utilizado su poder.

  Habla varios idiomas, para entenderse con gentes de varios mundos y declara haber viajado por más de 20 países.

  Yo realmente creo que ha viajado por muchos más, porque esa es la ventaja del escritor: que viaja siempre donde y cuando quiere, para luego regresar y contarlo.

  Y como dice ella misma en su novela “Cada viaje depende de cada viajero. Viajeros distintos viajes diferentes. Puedes, por tanto, pensar que eres el primero y único que hará tu viaje..."

  Y aunque esto es cierto, Lola nos permite a sus lectores viajar con ella a través de las páginas de Antakar a una serie de mundos en los que podemos confundir la realidad con la ficción, dos aspectos que aunque creamos que son distantes no siempre están tan lejanos la una de la otra.

  El libro de Lola García Cuesta es un libro imaginativo, que nos sitúa en unas claves más generosamente abiertas de las que tenemos en el llamado planeta Tierra.

  Sus horizontes, como su imaginación, no tienen límite y de alguna forma es una puerta abierta a la esperanza de que hay otras vidas.

  Yo siempre he pensando que lo que hay que hacer cuando se presenta un libro es dar algunas claves que inviten a leerlo, en vez de contar el libro, sobre todo si es una novela, porque ése es un placer que hay que dejar que disfrute el lector en solitario.

  Además he de añadir que en esta mesa están tanto la autora – experta en estos temas - como Luz Maria Anguita y Paloma Cirujano, ambas conocedoras de ese mundo que aborda Lola García Cuesta en Antakar.

  Yo soy un lector curioso de lo que viene del más allá o de los mundos desconocidos, y un escritor que escribe sobre la condición humana.

  Estoy más en el barro que en las alturas, pero a pesar de eso sí juego a veces con la imaginación y le encuentro más de una vida a mis personajes.

  Yo quiero felicitar a Lola por esta novela y agradecerle que la haya escrito y que la haya editado.

  Ese es un gesto de valentía, una señal de que cree en sí misma y que no se arredra ante ninguna dificultad de este mundo.

  Esa es la historia de Lola García Cuesta y también la historia de Antakar.”

  © DIEGO ARMARIO

  ******* Diego Armario es periodista y escritor. Autor de “La España de los 50 a través de Bardem y Berlanga”, “El triángulo: el PSOE durante la transición”, “La muerte de un señor de quinta”, “La hora cero”, “Universo Alzheimer”, y “Los tontos con poder”. Ha sido Director General de Radio Nacional de España. Actualmente es articulista, conferenciante y profesor de la universidad San Pablo y miembro del grupo de comunicación de la UNESCO en España.

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  ENFRENTARSE A UN FOLIO EN BLANCO

  (Transcripción de la presentación que Lola García Cuesta (***) hizo de su libro “Antakar, un cuento espiritual”, el día 1 de diciembre, de 2006. Centro Riojano. Madrid)

  “Enfrentarse a un folio en blanco. Ese es el punto en que el escritor puede manifestar su excelso acto creativo dando forma con las palabras a su visión interna: un mundo que solo él conoce, vive y experimenta. Un mundo que a veces se va manifestando muy poco a poco, palabra a palabra y otras, desde el mundo de las ideas, te agolpa abruptamente deseando comunicarse con este lado de la realidad donde se desea expresado, reconocido, vivido y sentido. Este mundo del escritor tan íntimo y personal, tan único e insondable que ante ese folio en blanco rasga el velo y se muestra a veces tímido, a veces descaradamente enérgico, pero en definitiva se muestra en su profunda necesidad de existir, sobre ese papel en blanco que sostendrá el prodigio que un ser creador ha, mágicamente, creado.

  La pasión por crear es un juego que se vive con necesidad. La creación inherente al ser humano, a veces permanece dormida por largos años pero, una vez despertada, reclama imperiosamente ser reconocida y manifestada. Entonces te hace cambiar tu mundo, tus motivaciones, tu visión, para llevarte de la mano a una nueva realidad por descubrir y experimentar. Una realidad que yo ahora os presento de la mano de Antakar, en este cuento de sueños y fantasía, en donde el color y la luz se revelan de maneras, incluso para mí, sorprendentes.

  Antakar es tan humano como cualquiera de nosotros, pero permanece abierto a su cambiante realidad, a la transformación que va viviendo en mundos y esferas nuevas para él. Lo hace a veces con decisión, otras con duda e incertidumbre. No es pues muy diferente a todos nosotros. Busca y ansía sus metas, la consecución de su sagrada misión. Y anhela el amor y la felicidad junto a su amada Nákar, una experiencia que desea vivir intensamente aunque se halla lejos de su realidad.

  Antakar es un maestro, aunque él no lo sabe. No ha reconocido aún su valía ni sabe de su gran potencial. Pero vive abierto y expectante ante lo desconocido, dejándose fluir. Y es, precisamente en su simplicidad en donde se halla su grandeza.

  Os invito a leer una experiencia única: la que vive Antakar. De esta manera, quizá sin proponéroslo, sintáis la magia de ese mundo de sueños y fantasía dentro de vosotros. Y ahí terminará mi papel como creadora y transmisora, como escritora, y empezará el vuestro abriéndoos a vuestra propia esencia vital y mágica.

  Gracias por haber aceptado mi invitación, por compartir conmigo este día, en este bellísimo escenario que es el Centro Riojano. Muchas gracias a la gerencia, D. Fernando Cruzado y a toda la Junta Directiva por su gran disponibilidad y apertura a que esta obra sea aquí presentada por vez primera. Muchas gracias a Luz María, Paloma y Diego por amadrinar-apadrinar mi primer libro. Muchas gracias a todos por venir a este acto. Espero seguir compartiendo ahora con todos vosotros.”

  © LOLA GARCIA CUESTA

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